La juventud, el género y el medio ambiente tienen un lugar importante en nuestras actividades:
Con demasiada frecuencia, los jóvenes son discriminados y excluidos, también en el mercado laboral. Con el 77% de los jóvenes que laboran en trabajos informales o precarios, qué duda cabe de que es todo un desafío organizar a este grupo diana.
Las personas mayores deben, asimismo, hacer frente a numerosos problemas: una movilidad reducida, problemas de salud o incluso la soledad y el aislamiento. Es evidente que estos hombres y mujeres forman un grupo más frágil que, por otro lado, crece como resultado de la evolución demográfica, y al que hay que apoyar y acompañar.
La igualdad de género significa igualdad de derechos e igualdad de oportunidades tanto para las mujeres como para los varones. Un principio básico importante que sigue siendo pisoteado. Debido a que las mujeres también constituyen la gran mayoría en la economía informal, ganan todavía menos que los varones por el mismo trabajo, asumen la mayoría de las tareas de cuidado y, por lo tanto, a menudo son excluidas del ámbito de la protección social.
WSM y sus contrapartes hacen denodados esfuerzos específicos para organizar a los jóvenes, las personas mayores y las mujeres, para adaptar sus servicios a sus necesidades e implicarlos en sus acciones y políticas.
El desarrollo ecológico es un pilar esencial del desarrollo sostenible, además de los pilares económicos y sociales. "No hay empleos en un planeta muerto" es una frase conocida que realmente lo resume todo. La justicia social y la sostenibilidad van de la mano y nosotros tratamos de integrarlas en nuestras intervenciones.